Lo que comenzó como un patrocinio de camisetas se convirtió en el laboratorio de innovación más exitoso del fútbol amateur español. Tras aplicar un sistema de análisis con Microsoft Copilot, el club barcelonés logró un ascenso histórico en mayo. Hoy, apenas cuatro meses después, se estrena en la 1ª RFEF con la misma filosofía: competir con recursos limitados, pero con tecnología de vanguardia.
“En segunda división nos enfrentamos a clubes profesionales que también usan tecnología avanzada”, reconoce María Victoria «Nany» Haces, entrenadora del equipo. “Nuestra ventaja es que llevamos un año perfeccionando el sistema y sabemos cómo aplicarlo”.
Un modelo replicable y en expansión
La metodología del CE Europa, impulsada junto a Founderz, se ha convertido en referencia. Durante el pasado curso, otros tres clubes españoles adoptaron el modelo con mejoras documentadas en rendimiento. Ahora, el equipo estrena nuevas capacidades: análisis de rivales profesionales, scouting automatizado y preparación física personalizada basada en datos biométricos.
“El Europa representa exactamente lo que creemos en Founderz: que la IA debe ser para todos, no solo para los grandes presupuestos”, destaca Anna Cejudo, co-CEO de Founderz. Impacto dentro y fuera del campo.
Más allá de los resultados deportivos, 15 jugadoras del Europa se han certificado en IA aplicada, trasladando este aprendizaje a ámbitos como la arquitectura, la fisioterapia o la gestión de proyectos. El caso ya se estudia en universidades españolas y despierta interés en otros deportes.
“El futuro del deporte no está reservado a los clubes con millones, sino a quienes se atreven a innovar”, afirma Pau Garcia-Milà, co-CEO de Founderz.